El
pasado 26 de junio, la plataforma digital y revista de viajes y turismo Internacional,
Travel and Tour World (TTW), con 10 millones de lectores, presentó una Lista Negra
del Turismo con “Destinos famosos en Instagram que están abarrotados, son
demasiado caros y ya no valen la pena” incluyendo a Machu Picchu por su elevada
afluencia diaria que causa erosión de senderos, acumulación de basura, sobrecarga
la infraestructura, además, que Aguas Calientes en una parada abarrotada y cara;
se ha convertido en tierra de nadie.
Aunque
el Ministerio de Cultura aduce que la publicación de TTW carece de
credibilidad, sustento técnico, que no le compete emitir evaluaciones oficiales,
y, la Municipalidad de Machu Picchu la calificó de sensacionalista y que no
existe sobresaturación ni descontrol turístico, sin embargo, la Contraloría, en
su Informe 010-2025-OCI/5765-S00 de fecha 29 de abril, identificó situaciones
adversas en Machu Picchu sobre la sobrecarga turística por encima de límites de
acceso sostenible aprobados en la red de Caminos Inka y Llaqta (Ciudad Inka), afectando
su integridad, autenticidad, equilibrio y conservación, estructura y ecosistema,
deteriorando caminos y plataformas incaicas, asimismo, identificó fallas en
venta de boletos; inclusive existen denuncias sobre mafias que controlan
la venta de entradas desde hace décadas.
En
la 46° reunión, en Nueva Delhi (julio 2024), del Comité del Patrimonio Mundial
de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura
(UNESCO) se advirtió preocupaciones del estado sobre la conservación de Machu
Picchu por su sobrecarga turística (estructuras y entorno natural), impacto
ambiental (biodiversidad y ecosistema) y gestión de sitio (conservación y
manejo sostenible). Y aunque UNESCO advierte que no se debe superar 4,000
visitantes diarios, el Ministerio de Cultura ha fijado 5,600 en temporada alta
(5 meses) y 4,500 en temporada baja (7 meses), y aún pretende aumentar la
capacidad; inclusive el alcalde del distrito de Machu Picchu propone
aumentarla a 6,600.
Bajo
este panorama, nuestra ciudadela de Machu Picchu, símbolo de identidad peruana,
fue reconocida en 1983 como patrimonio cultural de la humanidad por UNESCO y
desde 2007 es considerada entre las nuevas siete maravillas del mundo, sin
embargo, cabe recordar que esta organización, en 2011 y 2016, debido al turismo
no sostenible, consideró la posibilidad de incluirla en la Lista de Patrimonio
Mundial en Peligro, algo que podría repetirse si no se realizan actualmente
cambios estructurales que permitan equilibrar el turismo y la conservación sin
comprometer la integridad de la ciudadela, mejorar la gestión turística
responsable y sostenible, implementar estrategias efectivas para impulsar facilidades
de servicios, atención al turista, transparencia y control en gestión de
boletos, accesos y circuitos, mantenimiento y seguridad, con el fin de conservar
y preservar el valor universal excepcional de nuestro Santuario Histórico.
Artículo
de Alfredo Palacios dongo publicado en el diario EXPRESO, fecha 12 de julio de
2025